El suelo está que arde: Patrones térmicos vistos desde el satélite
¿Quién no ha llegado a saltitos hasta la orilla del mar, para evitar quemarse los pies con la arena de la playa?. La desesperación por entrar al agua de los bañistas muchas veces se hace incontrolable en esta época del año. Pero más allá de la anecdótica situación, lo cierto es que hoy en día tenemos herramientas que nos permiten conocer la temperatura a nivel del suelo. Si bien las estaciones meteorológicas miden la temperatura del aire, los satélites nos permiten conocer lo que sucede a nivel de superficie, en donde las temperaturas pueden superar los 50°C.
Durante los días de altas temperaturas es común sentir que la superficie del suelo, sobretodo si es pavimento, está mucho más caliente que el aire. Ejemplo de esto fue el pasado sábado en la zona central, en dónde la temperatura subió a valores entre 38 y 43°C.
Mientras los termómetros marcaban 38.3°C -temperatura del aire medida a 2 metros de altura en la estación Quinta Normal-, paralelamente se disputaba una fecha del campeonato internacional de Formula E (la fórmula eléctrica) en el Parque O’Higgins, en Santiago, lo que permitió tener una medida de la temperatura del asfalto. En promedio durante la carrera se midieron 45°C y en algunos momentos incluso 49°C.
Esta diferencia entre temperatura del aire y del suelo es común y depende de su tipo y la exposición a la radiación. Los agricultores saben muy bien de esto: en pleno invierno mientras a dos metros de altura la temperatura puede oscilar en torno a 4°C, a nivel de suelo se puede estar registrando una intensa helada. En el verano pasa lo contrario y la temperatura en superficie puede ser varios grados más caliente que la temperatura del aire.
Aquí es donde entran en acción los sensores remotos. Para obtener una estimación de la temperatura del suelo, podemos mirar en particular el sensor MODIS del satélite de órbita polar AQUA.
La figura muestra una comparación de la temperatura de suelo estimada por el satélite entre dos días de este mes de enero. A la izquierda, el día del récord de temperatura en Santiago (38.3°C en Quinta Normal), a la derecha un día de menor temperatura en la capital (29.2°C en Quinta Normal). El producto satelital permite distinguir entre zonas con superficies más cálidas y más frías.
Es notable que los valles centrales se muestran más cálidos que el entorno, en particular la Provincia de Chacabuco, en la zona norte de la Región Metropolitana, así como también el lado Oeste de la Región de O’Higgins, en las cercanías del Lago Rapel. La temperatura estimada por satélite incluso supera los 50°C el día 26 (color naranjo en la figura). Esta distribución de la temperatura del suelo coincide bastante bien con la distribución de la temperatura del aire del mismo día, en donde estas zonas alcanzaron temperaturas superiores a 40°C.
Si bien estos datos no son directamente extrapolables a temperatura del aire, sí dan una idea de la distribución del calor en días particulares. En general, se tienden a iluminar las mismas zonas aunque claramente con diferentes intensidades y esto podría estar altamente relacionado con el tipo de uso de suelo de esas zonas, ya sea terrenos secos o urbanizados, principalmente.
Escrito por: Diego Campos. Editor: José Vicencio. Periodista: Paz Galindo.
Procesamiento de la información satelital: Rodrigo Padilla.
Referencias de esta publicación:
- Más información sobre el producto LTS de MODIS aquí.
- Para conocer más sobre las diferencias de temperatura superficial del suelo (LST) y el aire, puedes revisar el siguiente paper.
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[…] meteorológicos y humanos) es la rápida propagación de incendios forestales. Como hemos visto en otras publicaciones de nuestro blog, los datos satelitales son de gran utilidad a la hora de monitorear variables […]